Pintura

'El olvido que nos habita', el realismo poético de Sánchez Zabaleta, hasta el 30 de marzo en el MUREC

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'Iglesia varada'

ALMERÍA HOY / 26·03·2025

Hasta el 30 de marzo, el Museo del Realismo Español Contemporáneo (MUREC) acoge la exposición 'El olvido que nos habita', una muestra de 18 obras del pintor Joseba Sánchez Zabaleta, inaugurada el 31 de enero y comisariada por Juan Manuel Martín Robles.

Nacido en Cistierna, León, pero afincado en Málaga, Joseba Sánchez Zabaleta es un artista cuya obra revela una profunda conexión con la tradición realista, especialmente con figuras como Alejandro Quincoces a quien descubrió en sus primeros pasos, o el maestro Antonio López. Sin embargo, su visión es única, imbuida de la sensibilidad y espiritualidad que le inspiran sus vivencias en Almería.

'El olvido que nos habita', el evocador título de la exposición, invita al espectador a adentrarse en el universo personal de Sánchez Zabaleta. A través de sus lienzos, el artista nos ofrece una mirada introspectiva sobre la memoria, el paso del tiempo y la esencia misma de la existencia.

Su compromiso con el realismo se manifiesta en la meticulosa representación de elementos naturales, objetos cotidianos y edificios abandonados, capturando la crudeza de su deterioro y la transformación de la materia. Esta mirada objetiva y detallada, característica de este estilo, revela la fugacidad del tiempo y la implacable realidad del paso de los años.

Cada uno de sus cuadros evocan el silencio desde una introspectiva que invita al espectador a convertirse en protagonista curioso de la escena. Una escena tranquila, de un transcurrir de vida que no urge, que transita calmada, estática, con un vacío que produce tranquilidad y reposo.

Su pintura carente casi de color logra, con perfección, conseguir una atmósfera que él recrea de manera magistral, y apenas unas notas de pigmento son suficientes para crear puntos de atracción que llaman poderosamente la curiosidad del que ve la obra, donde la ausencia se convierte en presencia y el silencio en elocuencia.

Esta exposición en el MUREC se erige, pues, como una cita ineludible para todo aquel que desee sumergirse en la poética visual del realismo, y especialmente para los amantes de los paisajes almerienses. Es una invitación a contemplar cómo la geografía se transforma en una sinfonía de formas y matices, guiada por la mirada sensible de un artista que ha sabido desvelar la magia austera, sublime y oculta de los rincones de Almería.