 |
| .. |
PASEO ABAJO/ Juan Torrijos
A Noemí Cruz, dicen en el PSOE provincial, hay que buscarle una salida política con sueldo, y ante la oposición de la ejecutiva y de los militantes de la local para que vaya de número uno en la lista del partido al Ayuntamiento de la capital, han organizado la campaña que hemos conocido estos días para intentar forzar una negociación con Fernando y Gutiérrez para buscarle un puesto de prestigio y de salida en la lista, podría ser el tres, dicen, y mandarla tras las elecciones (son conscientes que van a perder ante el PP y María Agüero, a pesar de algunas de las tonterías que ha venido haciendo Ramón en la ciudad) de portavoz a la Diputación provincial.
En la ejecutiva local se han tomado la acción emprendida por la provincial como una agresión en toda regla, con lo que la posibilidad de que se produzca un acuerdo entre las partes se ha tornado cuando menos complicado si no intervienen altas instancias del PSOE tanto en Madrid como en Sevilla.
Si en algo importa la militancia de los partidos, uno cree que cada vez un poco menos, deberían saber los señores de la provincial que en estos momentos la militancia local no está por la labor de apoyar a Noemí, es más, habría que decir que está de uñas, enfadada y algo más, bastante cabreada contra el equipo de José Antonio. Pero como a los militantes no se les hace demasiado caso, como se pasa de ellos cuando no se les ningunea, no es descabellado pensar que ese tercer puesto para Noemí lo consiga Juan Antonio Lorenzo de Fernando y cía, y es que en política lo que negro parece por la mañana, gris resulta al mediodía y blanco como la nieve se torna a lo largo de la tarde-noche.
Nos dirán, si se llega a lograr ese acuerdo que es por la unión y el bien del partido. Nada más lejos de la realidad. Será un nuevo trágala por el que tendrá que pasar la militancia ante una dirección que está pensando en sus intereses y en los de sus amigos, antes que en los de los militantes. Pero a eso ya están acostumbrados la gran mayoría de ellos y en todos los partidos. De ahí que cada vez voten menos en la convocatorias del partido y acudan cuatro a sus sedes, y los que lo hacen van empujados por líderes y amigos.
¿Quién ganará la partida, Juan Antonio o Fernando? Es lo que se pregunta el personal de cara a ese cercano mes de noviembre en que tiene que cerrarse el acuerdo o ir a una guerra sin cuartel. Guerra en la que no están interesados, de entrada, en el provincial, que prefiere salvar la cara de Noemí con un tercer puesto en la lista con Adriana y aterrizar como portavoz en el palacio de la calle Navarro Rodrigo. ¿Y para eso tienen que organizar esta trifulca?
Olvidando la pelea que se lleva a cabo, la pregunta sería. ¿Estará en la lista del PSOE algún nombre que pueda coger el relevo de Adriana en un futuro no muy lejano y que se vaya dando a conocer durante los próximos meses y años? Es posible que esté.
En la ejecutiva local se han tomado la acción emprendida por la provincial como una agresión en toda regla, con lo que la posibilidad de que se produzca un acuerdo entre las partes se ha tornado cuando menos complicado si no intervienen altas instancias del PSOE tanto en Madrid como en Sevilla.
Si en algo importa la militancia de los partidos, uno cree que cada vez un poco menos, deberían saber los señores de la provincial que en estos momentos la militancia local no está por la labor de apoyar a Noemí, es más, habría que decir que está de uñas, enfadada y algo más, bastante cabreada contra el equipo de José Antonio. Pero como a los militantes no se les hace demasiado caso, como se pasa de ellos cuando no se les ningunea, no es descabellado pensar que ese tercer puesto para Noemí lo consiga Juan Antonio Lorenzo de Fernando y cía, y es que en política lo que negro parece por la mañana, gris resulta al mediodía y blanco como la nieve se torna a lo largo de la tarde-noche.
Nos dirán, si se llega a lograr ese acuerdo que es por la unión y el bien del partido. Nada más lejos de la realidad. Será un nuevo trágala por el que tendrá que pasar la militancia ante una dirección que está pensando en sus intereses y en los de sus amigos, antes que en los de los militantes. Pero a eso ya están acostumbrados la gran mayoría de ellos y en todos los partidos. De ahí que cada vez voten menos en la convocatorias del partido y acudan cuatro a sus sedes, y los que lo hacen van empujados por líderes y amigos.
¿Quién ganará la partida, Juan Antonio o Fernando? Es lo que se pregunta el personal de cara a ese cercano mes de noviembre en que tiene que cerrarse el acuerdo o ir a una guerra sin cuartel. Guerra en la que no están interesados, de entrada, en el provincial, que prefiere salvar la cara de Noemí con un tercer puesto en la lista con Adriana y aterrizar como portavoz en el palacio de la calle Navarro Rodrigo. ¿Y para eso tienen que organizar esta trifulca?
Olvidando la pelea que se lleva a cabo, la pregunta sería. ¿Estará en la lista del PSOE algún nombre que pueda coger el relevo de Adriana en un futuro no muy lejano y que se vaya dando a conocer durante los próximos meses y años? Es posible que esté.
