Condenado a casi cuatro años de prisión por un atraco tras comprobar su ADN en una lata de cerveza

El fallo condena al acusado también por una falta de lesiones a una multa de seis euros diarios durante 40 días hasta los 240 euros




EUROPA PRESS / 03·10·2017

El Juzgado de lo Penal número 2 de Almería ha condenado a A.R.E. a tres años y once meses de prisión por un delito de robo con violencia después de que pudiera ser identificado tanto por el testimonio de la víctima como por las pruebas de ADN practicadas sobre la lata de cerveza que el acusado portaba en el momento del atraco, y que se dejó en el lugar de los hechos al abandonar a la víctima.

El fallo, consultado por Europa Press y sobre el que cabe recurso ante la Audiencia Provincial de Almería, condena al acusado también por una falta de lesiones a una multa de seis euros diarios durante 40 días hasta los 240 euros y remite testimonio al Juzgado de lo Penal número 5 de Almería, que hasta el momento le tenía suspendida la pena de un año de prisión por otro delito de robo con violencia al que fue condenado en abril de 2011.

Los hechos tuvieron lugar en junio de 2015 cuando, sobre las 13.00 horas, el acusado, a ver que su víctima iba a acceder al portal de su vivienda, ubicada en la capital almeriense, se introdujo en el mismo antes que ella. Una vez ambos dentro, el hombre la cogió de la mano en la que llevaba un monedero con 55 euros e inició un forcejeo con la mujer.

El acusado consiguió finalmente llevarse el monedero tras hacer que la mujer cayera al suelo herida. En el momento en el que salió del portal, el acusado arrojó la lata de cerveza que llevaba en la mano antes del atraco, de acuerdo con el fallo.

El juez valoró tanto la declaración de la víctima, quien en la vista oral volvió a reconocer «de un modo sincero» al acusado pese al tiempo transcurrido, y pese a los «cambios físicos» del mismo, que permanece en prisión por otra causa, así como la «contundente» prueba de ADN que se obtuvo a partir de la lata de cerveza que se intervino en el lugar del robo.

El magistrado señala que la tras la identificación por parte de la víctima de la lata, la policía custodió el envase, del que se trataron de obtener huellas aunque sin resultado, lo que según la explicación de uno de los agentes actuantes, podía deberse a que la lata estuviera húmeda o solo conservara huellas parciales o sin signos característicos. No obstante, la práctica del análisis de ADN «fue el que dio positivo».

De esta forma, rechaza la versión ofrecida por el acusado, quien alegó, por un lado, que compartía con amigos las latas de cerveza para explicar la presencia de su ADN en la lata; y por otro lado, que el día de los hechos estaba en casa de su padre para celebrar su santo. Para el juez, la explicación ofrecida por el acusado sobre la aparición de su perfil genético en el envase resulta, «aparte de evasiva y rocambolesca, difícil de creer», dado que «lo más probable es que hubiera aparecido en la lata o una huella u otro perfil de ADN» además del suyo.