ALMERÍA HOY / 27·12·2018
APROA-COEXPHAL han mostrado, en una reunión mantenida con Hortiespaña, su gran preocupación por los precios que está alcanzando el pepino producido en Almería y Granada, con niveles por debajo de los 20 céntimos, lo que está suponiendo notables pérdidas a los agricultores, que llevan casi un mes sin conseguir que los precios de venta compensen sus costes de producción.
La actual campaña de pepino de exportación en Almería y Granada había transcurrido dentro de relativa normalidad desde su comienzo hasta la semana 45 en que empezó una caída de precios desde los 0’95€ hasta cifras cercanas a los costes e incluso por debajo desde la semana 49 en la que se cotizó a 0’30€. Desde esa fecha hasta la actual los precios se han precipitado por debajo de los 0’20 euros.
Desde APROA-COEXPHAL coinciden en que las razones de esta crisis son varias. La primera: unas temperaturas mínimas más elevadas que las habituales en estas fechas, unidas a días muy soleados también con temperaturas elevadas, que han tenido como consecuencia un incremento de más del 30% del pepino disponible para el mercado.
Chalecos amarillos
La segunda razón ha sumado una dificultad en la logística debido a las movilizaciones de los “chalecos amarillos” en Francia, que han provocado retrasos en los días de viaje de los camiones y una falta de camiones disponibles, causando deterioro en la sucesión de llegadas y en la calidad del producto.
Ante esta situación, las empresas de comercialización asociadas a APROA-COEXPHAL están retirando pepino de manera habitual para afrontar esta situación, con un volumen sacado del mercado que supera los 1.500.000 kilográmos. Ya son habituales las imágenes de miles y miles de kilogramos retirados al mercado y llevados a espacios de compostaje o eliminación tanto en Granada como en Almería.
El problema se agrava cuando, en estas fechas, aproximadamente el 70% del pepino vendido en Europa procede de los invernaderos de Almería y Granada.
Soluciones
Para APROA-COEXPHAL las posibles soluciones pasan por la limpieza de los arrastres en los mercados y la limitación del producto que llega a los mismos, limitación que sólo parece capaz de ejecutar la meteorología. Actualmente, ha quedado demostrado que las herramientas de gestión de mercado que dispone la OCM son absolutamente insuficientes para afrontar crisis coyunturales tan profundas como la que están viviendo en el campo de Almería y Granada con el pepino.
La actual campaña de pepino de exportación en Almería y Granada había transcurrido dentro de relativa normalidad desde su comienzo hasta la semana 45 en que empezó una caída de precios desde los 0’95€ hasta cifras cercanas a los costes e incluso por debajo desde la semana 49 en la que se cotizó a 0’30€. Desde esa fecha hasta la actual los precios se han precipitado por debajo de los 0’20 euros.
Desde APROA-COEXPHAL coinciden en que las razones de esta crisis son varias. La primera: unas temperaturas mínimas más elevadas que las habituales en estas fechas, unidas a días muy soleados también con temperaturas elevadas, que han tenido como consecuencia un incremento de más del 30% del pepino disponible para el mercado.
Chalecos amarillos
La segunda razón ha sumado una dificultad en la logística debido a las movilizaciones de los “chalecos amarillos” en Francia, que han provocado retrasos en los días de viaje de los camiones y una falta de camiones disponibles, causando deterioro en la sucesión de llegadas y en la calidad del producto.
Ante esta situación, las empresas de comercialización asociadas a APROA-COEXPHAL están retirando pepino de manera habitual para afrontar esta situación, con un volumen sacado del mercado que supera los 1.500.000 kilográmos. Ya son habituales las imágenes de miles y miles de kilogramos retirados al mercado y llevados a espacios de compostaje o eliminación tanto en Granada como en Almería.
El problema se agrava cuando, en estas fechas, aproximadamente el 70% del pepino vendido en Europa procede de los invernaderos de Almería y Granada.
Soluciones
Para APROA-COEXPHAL las posibles soluciones pasan por la limpieza de los arrastres en los mercados y la limitación del producto que llega a los mismos, limitación que sólo parece capaz de ejecutar la meteorología. Actualmente, ha quedado demostrado que las herramientas de gestión de mercado que dispone la OCM son absolutamente insuficientes para afrontar crisis coyunturales tan profundas como la que están viviendo en el campo de Almería y Granada con el pepino.