La asociación reclama asimismo la dimisión del delegado de Cultura, Alfredo Valdivia, a quien acusa de «falta de transparencia democrática, incompetencia y mentiras»
Miembros de la directiva de Amigos de la Alcazaba durante el desayuno informativo de este miércoles. |
ALMERÍA HOY / 07·09·2016
La Asociación Amigos de la Alcazaba ha acudido a la Fiscalía Provincial de Almería para denunciar «la agresión y presunto delito contra el Patrimonio Histórico en la Alcazaba por la perforación no autorizada de los muros de su Patio de Armas».
En un desayuno con periodistas celebrado este miércoles, la presidenta de la Asociación, María Teresa Pérez, ha asegurado que en el 'taladrazo' «ha habido por parte de la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía falta de transparencia democrática, incompetencia y mentiras». Por todo eso, además de solicitar a la Fiscalía Provincial que abra una investigación, ha vuelto a reclamar públicamente «la dimisión del delegado de Cultura, Alfredo Valdivia. No queremos que se cierre en falso ni se dé carpetazo al asunto poniendo en bandeja la cabeza de la directora de la Alcazaba. El máximo responsable es el delegado de Cultura, que sabía todo lo sucedido desde el primer día, y también debe dimitir. No es digno de velar por el patrimonio de la provincia».
El escrito ha sido presentado ante la Fiscalía el 18 de agosto y en el mismo se relatan los hechos, sucedidos el 18 de junio —realización de veinte perforaciones que se realizaron en los muros del tercer recinto de la Alcazaba al instalar las gradas y andamiajes para la celebración de varios espectáculos—, donde «se deducen datos contradictorios con la información proporcionada y hecha pública hasta ahora por la Delegación Provincial de Cultura de Almería», según ha explicado la asociación en una nota.
Una de las claves se encontraría en el supuesto coste de 150 euros anunciado por la Junta de Andalucía para la restauración de los daños de las perforaciones del muro del tercer recinto de la Alcazaba, inferior a los 400 euros, a partir de los cuales ya se deben tramitar los daños como delito contra el patrimonio histórico. La Asociación asegura haber solicitado varios presupuestos a empresas de restauración para este mismo trabajo, situándose en el más económico en 3.112,44 euros. A su vez, se sorprenden que en 48 horas, como afirma la Junta de Andalucía, se haya resuelto la restauración, cuando es necesario, según la Ley, la tramitación por la Comisión de Patrimonio, elaborar un proyecto de restauración y una memoria.
La presidenta de Amigos de la Alcazaba considera que ha habido falta de transparencia democrática, pues «el tercer recinto estuvo cerrado más de 30 días mientras que la reparación se realizó supuestamente en 48 horas», además de que «en ninguna de las reuniones del Foro Alcazaba se ha facilitado ningún tipo de documentación ni información técnica».
También ha criticado la, a su juicio, incompetencia de la Delegación de Cultura, ya que «no hubo protocolo de actuación, no hubo vigilancia adecuada, y se quiso culpar a los trabajadores de la Alcazaba»; así como los engaños del delegado de Cultura, quien «quiso minimizar los daños mintiendo sobre el conocimiento de los hechos».
Por su parte, el vicepresidente de Amigos de la Alcazaba, Francisco Verdegay, ha lamentado que «la Consejería de Cultura quiera ponerse por encima de la ley, en vez de velar por el cumplimiento de las leyes».
En un desayuno con periodistas celebrado este miércoles, la presidenta de la Asociación, María Teresa Pérez, ha asegurado que en el 'taladrazo' «ha habido por parte de la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía falta de transparencia democrática, incompetencia y mentiras». Por todo eso, además de solicitar a la Fiscalía Provincial que abra una investigación, ha vuelto a reclamar públicamente «la dimisión del delegado de Cultura, Alfredo Valdivia. No queremos que se cierre en falso ni se dé carpetazo al asunto poniendo en bandeja la cabeza de la directora de la Alcazaba. El máximo responsable es el delegado de Cultura, que sabía todo lo sucedido desde el primer día, y también debe dimitir. No es digno de velar por el patrimonio de la provincia».
El escrito ha sido presentado ante la Fiscalía el 18 de agosto y en el mismo se relatan los hechos, sucedidos el 18 de junio —realización de veinte perforaciones que se realizaron en los muros del tercer recinto de la Alcazaba al instalar las gradas y andamiajes para la celebración de varios espectáculos—, donde «se deducen datos contradictorios con la información proporcionada y hecha pública hasta ahora por la Delegación Provincial de Cultura de Almería», según ha explicado la asociación en una nota.
Una de las claves se encontraría en el supuesto coste de 150 euros anunciado por la Junta de Andalucía para la restauración de los daños de las perforaciones del muro del tercer recinto de la Alcazaba, inferior a los 400 euros, a partir de los cuales ya se deben tramitar los daños como delito contra el patrimonio histórico. La Asociación asegura haber solicitado varios presupuestos a empresas de restauración para este mismo trabajo, situándose en el más económico en 3.112,44 euros. A su vez, se sorprenden que en 48 horas, como afirma la Junta de Andalucía, se haya resuelto la restauración, cuando es necesario, según la Ley, la tramitación por la Comisión de Patrimonio, elaborar un proyecto de restauración y una memoria.
La presidenta de Amigos de la Alcazaba considera que ha habido falta de transparencia democrática, pues «el tercer recinto estuvo cerrado más de 30 días mientras que la reparación se realizó supuestamente en 48 horas», además de que «en ninguna de las reuniones del Foro Alcazaba se ha facilitado ningún tipo de documentación ni información técnica».
También ha criticado la, a su juicio, incompetencia de la Delegación de Cultura, ya que «no hubo protocolo de actuación, no hubo vigilancia adecuada, y se quiso culpar a los trabajadores de la Alcazaba»; así como los engaños del delegado de Cultura, quien «quiso minimizar los daños mintiendo sobre el conocimiento de los hechos».
Por su parte, el vicepresidente de Amigos de la Alcazaba, Francisco Verdegay, ha lamentado que «la Consejería de Cultura quiera ponerse por encima de la ley, en vez de velar por el cumplimiento de las leyes».