Fundador de las célebres Fiestas de Moros y Cristianos de la localidad y de la asociación ecologista ANCLA
Fotografía: Emilio Aramburu |
ALMERÍA HOY / 09·03·2015
El que fuera alcalde de Mojácar entre los años 2003 y 2005, Carlos Cervantes, fallecía este viernes a causa de un ictus a la edad de 57 años. Delineante de profesión y originario de la pedanía mojaquera de El Sopalmo, Cervantes compaginó durante cerca de una década su trabajo en el estudio de arquitectura de Ginés Ridao, en el que entró en 1988, con su labor de oposición como concejal de Izquierda Unida.
Tras las elecciones municipales de mayo de 2003, a las que concurre encabezando la candidatura de Asamblea de Izquierdas —escisión provincial de Izquierda Unida—, accede a la Alcaldía al frente de un cuatripartito —AI, Partido Andalucista, Grupo Independiente por Almería (GIAL) y Nuevo Grupo Mojácar—, hasta que en julio de 2005 es desalojado de la misma a raíz de una moción de censura planteada por PP y PSOE con el apoyo de un concejal andalucista.
En mayo de 2007 regresa al equipo de Gobierno como parte de un nuevo cuatripartito que otorga la Alcaldía a la 'popular' Rosa María Cano, del que es expulsado en febrero de 2011 por su oposición al proyecto de construcción de un parking municipal.
En mayo de 2011, tres años más tarde de haberle sido diagnosticada una grave enfermedad, abandona definitivamente la política poniendo fin a más de 15 años de trabajo como edil en el Consitorio.
Jovial y combativo
Apasionado de la naturaleza y la arqueología, Cervantes desarrolló durante toda su vida una intensa labor reivindicativa que le llevó a fundar, a comienzos de los 90, la asociación ecologista ANCLA, e incluso a ser detenido en 2007 cuando se oponía al levantamiento de una torre de transporte eléctrico de alta tensión junto a la casa de una vecina de la localidad. Protagonizó las protestas de ANCLA contra la construcción del puente sobre la laguna del Río Aguas; permaneció en pie durante largas temporadas en los plenos municipales para mostrar su desacuerdo con la política urbanística; expuso públicamente la falsedad de un informe medioambiental aportado por la Delegación Provincial de Obras Públicas para no acometer las obras de circunvalación del núcleo costero; y no dudó en enfrentarse a otros grupos ecologistas a la hora de defender los intereses del municipio.
Su naturaleza combativa no estuvo reñida, sin embargo, con la exhibición de un carácter afable y jovial, llegando en una ocasión —recuerdan sus allegados— a enterrar trozos de una vasija que él mismo había comprado y roto en una excavación arqueológica; sólo por ver, explicó entonces, si esa gente —técnicos de la Universidad de La Laguna— sabía lo que se hacía.
Fiestas de Moros y Cristianos
Durante su breve paso por la Alcaldía, tramitó la construcción de un nuevo campo municipal de fútbol así como la de un pabellón polideportivo, no obstante, y pese a su dilatada trayectoria política, Carlos Cervantes será siempre recordado por ser el impulsor de las célebres Fiestas de Moros y Cristianos, festejo que importó en 1987 desde Alicante, y que se celebra desde entonces con gran éxito cada mes de junio.
Cervantes conoció esta festividad a comienzos de los 80, mientras trabajaba en la construcción de la autovía A-7 en Villajoyosa (Alicante), donde fue uno de los cofundadores de la comparsa 'Los Beduinos de la Nova'. Ya en 1987, un año antes de la celebración del V Centenario de la rendición de Mojácar a los Reyes Católicos, organizó un primer desfile en el que participaron los miembros de la recién creada 'Kábila de Moros Viejos' (Ali Cuquei) junto a los 'Moros Viejos' de Calpe (Alicante).
En el año 2008 fue nombrado presidente de honor de la kábila, a cuya dirección se negó siempre a pertenecer a pesar de ser uno de los fundadores. Cuatro años más tarde, en noviembre de 2012, recibió el premio 'Indalo de Oro' en reconocimiento a su labor de promoción turística del municipio.
Tras las elecciones municipales de mayo de 2003, a las que concurre encabezando la candidatura de Asamblea de Izquierdas —escisión provincial de Izquierda Unida—, accede a la Alcaldía al frente de un cuatripartito —AI, Partido Andalucista, Grupo Independiente por Almería (GIAL) y Nuevo Grupo Mojácar—, hasta que en julio de 2005 es desalojado de la misma a raíz de una moción de censura planteada por PP y PSOE con el apoyo de un concejal andalucista.
En mayo de 2007 regresa al equipo de Gobierno como parte de un nuevo cuatripartito que otorga la Alcaldía a la 'popular' Rosa María Cano, del que es expulsado en febrero de 2011 por su oposición al proyecto de construcción de un parking municipal.
En mayo de 2011, tres años más tarde de haberle sido diagnosticada una grave enfermedad, abandona definitivamente la política poniendo fin a más de 15 años de trabajo como edil en el Consitorio.
Jovial y combativo
Apasionado de la naturaleza y la arqueología, Cervantes desarrolló durante toda su vida una intensa labor reivindicativa que le llevó a fundar, a comienzos de los 90, la asociación ecologista ANCLA, e incluso a ser detenido en 2007 cuando se oponía al levantamiento de una torre de transporte eléctrico de alta tensión junto a la casa de una vecina de la localidad. Protagonizó las protestas de ANCLA contra la construcción del puente sobre la laguna del Río Aguas; permaneció en pie durante largas temporadas en los plenos municipales para mostrar su desacuerdo con la política urbanística; expuso públicamente la falsedad de un informe medioambiental aportado por la Delegación Provincial de Obras Públicas para no acometer las obras de circunvalación del núcleo costero; y no dudó en enfrentarse a otros grupos ecologistas a la hora de defender los intereses del municipio.
Su naturaleza combativa no estuvo reñida, sin embargo, con la exhibición de un carácter afable y jovial, llegando en una ocasión —recuerdan sus allegados— a enterrar trozos de una vasija que él mismo había comprado y roto en una excavación arqueológica; sólo por ver, explicó entonces, si esa gente —técnicos de la Universidad de La Laguna— sabía lo que se hacía.
Fiestas de Moros y Cristianos
Durante su breve paso por la Alcaldía, tramitó la construcción de un nuevo campo municipal de fútbol así como la de un pabellón polideportivo, no obstante, y pese a su dilatada trayectoria política, Carlos Cervantes será siempre recordado por ser el impulsor de las célebres Fiestas de Moros y Cristianos, festejo que importó en 1987 desde Alicante, y que se celebra desde entonces con gran éxito cada mes de junio.
Cervantes conoció esta festividad a comienzos de los 80, mientras trabajaba en la construcción de la autovía A-7 en Villajoyosa (Alicante), donde fue uno de los cofundadores de la comparsa 'Los Beduinos de la Nova'. Ya en 1987, un año antes de la celebración del V Centenario de la rendición de Mojácar a los Reyes Católicos, organizó un primer desfile en el que participaron los miembros de la recién creada 'Kábila de Moros Viejos' (Ali Cuquei) junto a los 'Moros Viejos' de Calpe (Alicante).
En el año 2008 fue nombrado presidente de honor de la kábila, a cuya dirección se negó siempre a pertenecer a pesar de ser uno de los fundadores. Cuatro años más tarde, en noviembre de 2012, recibió el premio 'Indalo de Oro' en reconocimiento a su labor de promoción turística del municipio.