José Manuel Ortiz: «Vimos antes lo que pasó y lo vemos ahora en enero, no se puede estar corriendo un riesgo continuo»

El delegado de Agricultura de la Junta de Andalucía cifra en 20 las hectáreas dañadas por el granizo e insta a los agricultores a asegurar los cultivos




EUROPA PRESS / 20·01·2015

El delegado territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía en Almería, José Manuel Ortiz, ha señalado este martes que, según las primeras estimaciones realizadas por los técnicos de la Administración autonómica sobre el terreno, la superficie dañada por la tormenta de granizo, nieve y lluvia en el Poniente almeriense se situaría «en torno a unas 20 hectáreas», si bien la cifra podría variar conforme avancen los trabajos.

En declaraciones a Europa Press, Ortiz Bono ha explicado que los técnicos de la Junta han acudido a los municipios de La Mojonera, Roquetas de Mar y El Ejido, donde han comprobado que el núcleo ejidense de San Agustín ha sido el más afectado.

No obstante, ha precisado que la situación «no es parecida a la de hace dos años» cuando, en noviembre de 2013, el temporal provocó el desplome unas 106 hectáreas de invernaderos, lo que hizo que se perdiera una cosecha de 30 hectáreas aproximadamente. Por esta catástrofe, la Junta otorgó ayudas por valor de tres millones de euros a raíz de 67 peticiones por las que se sumaban 65 hectáreas, ha recordado Ortiz.

El delegado ha apuntado además que algunos de los productores de la zona carecían de seguro agrario, por lo que ha instado a los agricultores a contratar una póliza que les dé protección ante este tipo de eventualidades. «Vimos antes lo que pasó y lo vemos ahora en enero, no se puede estar corriendo un riesgo continuo», ha apostillado.

El titular territorial de Agricultura ha recomendado a los afectados que se pongan en contacto con sus seguros para tratar de recobrar la normalidad lo antes posible y agilizar las valoraciones, en caso de que tengan una póliza. Asimismo, ha recomendado que se acuda a la oficina comarcal agraria para dar parte de los daños, que se han visto también reflejados en una amplia red de caminos rurales inundados.