La propietaria presenta alegaciones contra las obras subsidiarias que el Gobierno quiere realizar para consolidar los muros
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| Estado actual del Cortijo del Fraile, declarado BIC desde el año 2010 |
EUROPA PRESS/ 18·10·2014
La empresa propietaria de los terrenos en los que se ubica el Cortijo del Fraile, el bien de interés cultural (BIC) almeriense que inspiró «Bodas de Sangre» de Federico García Lorca, ha anunciado que presentará alegaciones al expediente de ejecución subsidiaria de obras planteado por la Junta de Andalucía, que pretende realizar trabajos para la consolidación del inmueble después de que la empresa haya rechazado acometer una actuación de forma voluntaria.
Según explicaron a Europa Press representantes de la sociedad Agrícola Mar Menor, se recibió por parte de la Delegación Territorial de Educación, Cultura y Deporte en Almería el acuerdo de inicio de obras de ejecución subsidiaria a raíz del mencionado expediente, que contempla trabajos para afianzar la capilla y el muro norte del inmueble.
No obstante, a partir de la recepción de esta notificación, la empresa cuenta con un plazo de diez días para la presentación de alegaciones, algo que ya ha hecho, y que remitirá al Gobierno andaluz. Cabe recordar que la Administración autonómica emitió una segunda resolución este verano para que la Sociedad Agrícola Mar Menor efectuara obras de consolidación valoradas en 44.000 euros sobre parte del edificio; una resolución que la empresa mantiene recurrida por vía de alzada ante la Consejería.
Por su parte, la empresa anunció también este verano su interés en presentar un proyecto propio valorado en más de 100.000 euros condicionado a las acciones de la Junta para adquirir el BIC, si bien ninguna de las partes se ha pronunciado sobre este asunto aún.
Por el momento, la Junta no se plantea iniciar un expediente sancionador contra la empresa por no haber cumplido con la última resolución dictada y tendrá que estudiar las alegaciones que presente la sociedad antes de decidir si actúa o no subsidiariamente sobre el inmueble, en estado de ruina.
El Cortijo del Fraile está ubicado sobre una finca de más de 700 hectáreas. Su estado actual es de ruina y total abandono. Miles de personas se han manifestando en protesta por la situación en que se encuentra. Y han sido muchas las negociaciones iniciadas para darle una solución que no llega. El problema reside en que la Junta de Andalucía no quiere asumir el gasto global que supondría su restauración y puesta en valor, que rondaría los cinco millones de euros; como tampoco la propietaria del inmueble, que en una carta ya cedió el cortijo al Gobierno a cambio de una permuta de terrenos. Algo sobre lo que el Gobierno aún no se ha pronunciado. Así, la pelota se va pasando de mano en mano, y cada vez que hay un enfrentamiento, como este último, la pelota golpea los muros del Cortijo, que se cae literalmente a pedazos.
Desde 2010 el Cortijo del Fraile está considerado Bien de Interés Cultural (BIC) con la tipología de «Sitio Histórico». En el año 2011 sufrió algunos desperfectos y se desplomaron unos muros. En ese momento, el Ayuntamiento de Níjar propuso que la Junta podría permutar el Cortijo, por unos terrenos y así compensar al propietario.
Por su parte, la Sociedad Agrícola Mar Menor, de capital murciano, ofreció a la Administración autonómica la cesión gratuita del emblemático edificio de Níjar, durante los próximos 50 años, mediante una carta dirigida a la delegada provincial de Educación y Cultura, Isabel Arévalo, y lo hizo después de haber sido multada por la Junta hasta en nueve ocasiones -con un total de 33.000 euros- y de haber sido sancionada con otros 30.000 euros por haberse negado a atender los requerimientos para consolidar y rehabilitar el edificio. La Junta sigue rechazando las ofertas de la empresa propietaria y del Consistorio.
Según explicaron a Europa Press representantes de la sociedad Agrícola Mar Menor, se recibió por parte de la Delegación Territorial de Educación, Cultura y Deporte en Almería el acuerdo de inicio de obras de ejecución subsidiaria a raíz del mencionado expediente, que contempla trabajos para afianzar la capilla y el muro norte del inmueble.
No obstante, a partir de la recepción de esta notificación, la empresa cuenta con un plazo de diez días para la presentación de alegaciones, algo que ya ha hecho, y que remitirá al Gobierno andaluz. Cabe recordar que la Administración autonómica emitió una segunda resolución este verano para que la Sociedad Agrícola Mar Menor efectuara obras de consolidación valoradas en 44.000 euros sobre parte del edificio; una resolución que la empresa mantiene recurrida por vía de alzada ante la Consejería.
Por su parte, la empresa anunció también este verano su interés en presentar un proyecto propio valorado en más de 100.000 euros condicionado a las acciones de la Junta para adquirir el BIC, si bien ninguna de las partes se ha pronunciado sobre este asunto aún.
Por el momento, la Junta no se plantea iniciar un expediente sancionador contra la empresa por no haber cumplido con la última resolución dictada y tendrá que estudiar las alegaciones que presente la sociedad antes de decidir si actúa o no subsidiariamente sobre el inmueble, en estado de ruina.
El Cortijo del Fraile está ubicado sobre una finca de más de 700 hectáreas. Su estado actual es de ruina y total abandono. Miles de personas se han manifestando en protesta por la situación en que se encuentra. Y han sido muchas las negociaciones iniciadas para darle una solución que no llega. El problema reside en que la Junta de Andalucía no quiere asumir el gasto global que supondría su restauración y puesta en valor, que rondaría los cinco millones de euros; como tampoco la propietaria del inmueble, que en una carta ya cedió el cortijo al Gobierno a cambio de una permuta de terrenos. Algo sobre lo que el Gobierno aún no se ha pronunciado. Así, la pelota se va pasando de mano en mano, y cada vez que hay un enfrentamiento, como este último, la pelota golpea los muros del Cortijo, que se cae literalmente a pedazos.
Desde 2010 el Cortijo del Fraile está considerado Bien de Interés Cultural (BIC) con la tipología de «Sitio Histórico». En el año 2011 sufrió algunos desperfectos y se desplomaron unos muros. En ese momento, el Ayuntamiento de Níjar propuso que la Junta podría permutar el Cortijo, por unos terrenos y así compensar al propietario.
Por su parte, la Sociedad Agrícola Mar Menor, de capital murciano, ofreció a la Administración autonómica la cesión gratuita del emblemático edificio de Níjar, durante los próximos 50 años, mediante una carta dirigida a la delegada provincial de Educación y Cultura, Isabel Arévalo, y lo hizo después de haber sido multada por la Junta hasta en nueve ocasiones -con un total de 33.000 euros- y de haber sido sancionada con otros 30.000 euros por haberse negado a atender los requerimientos para consolidar y rehabilitar el edificio. La Junta sigue rechazando las ofertas de la empresa propietaria y del Consistorio.
